ANTO DOMINGO. En un contexto global marcado por la crisis sanitaria de influenza aviar que afecta a Estados Unidos, República Dominicana ha logrado mantener un firme control preventivo de la enfermedad, consolidando su industria avícola como un pilar fundamental para la seguridad alimentaria del país y la región. Así lo afirmó José Luis Polanco, presidente de la Asociación Dominicana de Avicultura (ADA), durante un reciente informe sobre el estado del sector.
Polanco destacó que, para febrero y marzo de 2025, se proyecta una producción mensual de aproximadamente 350 millones de huevos, lo que refleja un crecimiento sostenido en la oferta de este producto básico. “El huevo es una fuente accesible de proteína para la población y, además, se ha convertido en un nuevo renglón de exportación para el país”, explicó.
Prevención y vacunación: claves del éxito
Desde 2019, República Dominicana ha implementado un programa de vacunación contra la influenza aviar, lo que ha permitido proteger la producción local y garantizar la estabilidad de la industria avícola. Esta medida ha sido fundamental para evitar brotes de la enfermedad, especialmente en un momento en que otros países, como Estados Unidos, enfrentan desafíos significativos en este ámbito.
Crecimiento de las exportaciones
Las exportaciones dominicanas de huevos han experimentado un aumento notable en los últimos años. Actualmente, el país suministra este producto a mercados como Cuba, Aruba y Haití. Durante 2024, las exportaciones mensuales alcanzaron un promedio de 67 millones de unidades, lo que evidencia la capacidad del sector para satisfacer la demanda internacional sin comprometer el consumo local.
Estabilidad de precios en un mercado volátil
Miguel A. Lajara, miembro de la ADA, resaltó que, a pesar de la volatilidad de los precios en los mercados internacionales, República Dominicana ha logrado mantener una estructura de precios estable. “Esta estabilidad es resultado del compromiso de la ADA y de las autoridades, quienes han implementado programas de prevención y control sanitario”, señaló.
Lajara también destacó que, en respuesta a la crisis de producción en Estados Unidos, el país ha desarrollado un plan de crecimiento en la producción de huevos. Este plan no solo refuerza la capacidad de abastecimiento para el mercado local, sino que también consolida la posición de República Dominicana como un proveedor confiable para la exportación.
Medidas sanitarias y estrategias de expansión
La combinación de medidas sanitarias estrictas y estrategias de expansión ha sido clave para garantizar un suministro estable y seguro de huevos. Estas acciones han permitido al país enfrentar los desafíos globales y posicionarse como un actor relevante en el mercado avícola internacional.
En resumen, la industria avícola dominicana continúa su trayectoria de crecimiento, demostrando resiliencia frente a las adversidades globales y reforzando su papel como garante de la seguridad alimentaria en la región.