Nueva York – Desesperados por cortar una racha negativa, los Mets de Nueva York sacudieron su alineación y la jugada funcionó a la perfección: un explosivo despertar ofensivo liderado por Brandon Nimmo y Francisco Lindor les dio vida en la segunda parte de la doble cartelera, evitando un desastre mayor en la División Este.
El ajuste que lo cambió todo
El mánager Carlos Mendoza tomó una decisión audaz para el segundo juego:
- Brandon Nimmo ascendió al primer puesto (normalmente ocupado por Lindor).
- Francisco Lindor se movió al segundo lugar.
- El resultado fue contundente:
- Nimmo conectó un grand slam en el 3er inning ante un lanzamiento de 98 mph del relevista rival.
- Lindor respondió con jonrones consecutivos (incluyendo uno de 3 carreras) y acabó con 4 RBI en la noche.
- Los Mets ganaron 9-4, rompiendo una racha de 5 derrotas en 6 juegos.
“Necesitábamos un chispazo”
- Nimmo (tras el grand slam): “A veces un pequeño cambio te saca de la rutina. Hoy sentí esa energía diferente”.
- Lindor (sobre su jonrón de 3 carreras): “Cuando ves a Nimmo impulsar así, es contagioso. Esto puede ser el punto de quiebre”.
- Carlos Mendoza: “Teníamos que probar algo. La ofensiva respondió como esperábamos”.
¿Por qué funcionó?
- Nimmo como leadoff: Su paciencia (.387 OBP) generó oportunidades tempranas.
- Lindor en segundo lugar: Más chances de batear con hombres en base (3-4, 2 HR, 4 RBI).
- Presión al rival: Los Mets anotaron en 4 de los primeros 5 innings.
Impacto en la división
La victoria mantiene a los Mets (44-42) en la pelea por el Wild Card, evitando que los Braves y Filies se alejen. El lanzador Clay Holmes, quien antes del juego clamó por un “fuego” que reviviera al equipo, celebró: “Esto es lo que necesitábamos”.
