Siete organizaciones políticas han sumado su respaldo a la marcha-caravana convocada para este miércoles 19 de febrero en rechazo a las acciones de la minera Barrick Gold en la región. La manifestación, organizada por sacerdotes católicos, ecologistas y movimientos populares, tiene como objetivo denunciar los impactos ambientales y sociales generados por la empresa minera en las comunidades locales.
La protesta partirá a las 10:00 a.m. desde la autopista Duarte, en la entrada de Jima-Sabana del Puerto, en Bonao, y contará con la participación de diversas organizaciones sociales y políticas. Entre las demandas principales de los manifestantes se encuentran la oposición a la construcción de una nueva presa de colas en el distrito municipal de Zambrana Abajo, así como la reubicación digna de las comunidades afectadas por la presa del Llagal, en Cotuí.
Las organizaciones convocantes, entre las que se encuentran el Movimiento Caamañista (MC), Fuerza de la Revolución (FR), Partido Patria para Todos (PPT), Movimiento Popular Dominicano (MPD), Referente de Izquierda Dominicana (RID), Partido Comunista del Trabajo (PCT) y Opción Democrática (OD), han unido fuerzas para llamar a la población a sumarse a la movilización.
Denuncias contra Barrick Gold
Los organizadores de la marcha acusan a Barrick Gold de contaminar los ríos y fuentes de agua de la región mediante el uso de cianuro y otros productos químicos tóxicos utilizados en sus operaciones mineras. Según las denuncias, esta contaminación ha dejado a miles de familias sin acceso a agua potable, afectando gravemente su calidad de vida.
Además, los manifestantes sostienen que la empresa está destruyendo los paisajes y la biodiversidad de la zona, convirtiendo tierras fértiles en áreas áridas e inservibles. “La región de Cotuí y sus alrededores están en grave peligro debido a la contaminación generada por la minería”, señalaron los líderes de las organizaciones.
Impacto social y desplazamiento de comunidades
Las organizaciones también denuncian que Barrick Gold ha desalojado a comunidades enteras de sus tierras ancestrales sin ofrecer una compensación justa, lo que ha sumido a estas poblaciones en la pobreza. “Prometen progreso y desarrollo, pero lo único que dejan a su paso son enfermedades, contaminación y abandono”, expresaron los representantes de los movimientos sociales.
En respuesta a esta situación, los convocantes de la marcha exigen la reubicación digna de los campesinos afectados, con una compensación económica previa que garantice su sustento y bienestar. Asimismo, reclaman la protección de la biodiversidad y el medio ambiente, así como la implementación de políticas públicas que prioricen el cuidado de los recursos naturales y la salud de las comunidades.